Entre los papeles que sobreviven de Thelonious Monk hay un conjunto de notas manuscritas que circulan desde hace años como una especie de testamento poético. No son reglas fijas ni un manifiesto. Son observaciones sueltas, casi aforismos, que condensan una filosofía musical y vital.
Las escribió a mano, probablemente para alguno de sus músicos. Fue Steve Lacy —saxofonista soprano que tocó con Monk a fines de los 50— quien tuvo la lucidez de transcribirlas y preservarlas. Hoy son un documento revelador, casi un espejo de su forma de ser y de sonar.
Monk no era un teórico. Era un intuitivo. Un original absoluto. Su piano parecía desafinar el tiempo y empujar los silencios. Y, sin embargo, había en su arte una lógica profunda. No la del cálculo, sino la de la autenticidad. En esas notas se revela ese espíritu: el de alguien que no buscaba agradar, sino encontrar.
«Solo porque no seas baterista no significa que no tengas que llevar el tiempo»
Just because you're not a drummer, doesn't mean you don't have to keep time.
La responsabilidad del ritmo es de todos. Incluso del que calla.
«Golpeá tu pie y cantá la melodía en tu cabeza mientras tocás»
Pat your foot and sing the melody in your head when you play.
La música nace del cuerpo y la memoria. El ritmo es corporal. La melodía, interior.
«Dejá de tocar esas notas raras: tocá la melodía»
Stop playing all those weird notes, play the melody.
Monk, el maestro de las notas inesperadas, recomienda volver al centro.
«Hacé que el baterista suene bien»
Make the drummer sound good.
El jazz es colectivo. Si el otro brilla, vos también.
«La discriminación (musical) es importante»
Discrimination is important.
Elegir qué tocar y cuándo tocarlo. Saber decir que no.
«Tenés que sentirlo para sentirlo, ¿entendés?»
You’ve got to dig it to dig it, you dig?
No se puede fingir el groove.
«Debe ser de noche, si no, no harían falta las luces»
It must be always night, otherwise they wouldn't need the lights.
Una frase absurda y profunda. Como una escena de Lynch.
«Elevemos el escenario»
Let's lift the bandstand.
Una invocación al espíritu. Que la música levante el piso.
«No toques todo (ni todo el tiempo); dejá que algunas cosas pasen de largo»
Don't play everything (or every time); let some things go by.
Tocar también es saber callar.
«Una nota puede ser tan pequeña como un alfiler o tan grande como el mundo»
A note can be as small as a pin or as big as the world, it depends on your imagination.
Todo depende de cómo se escuche.
«Un genio es aquel que más se parece a sí mismo»
A genius is the one most like himself.
No hay receta. Hay identidad.